Al alba luces de otoño (Hallsttat, Austria)
Alborea el otoño en mil matices. Despierta Hallsttat ante mis ojos. Se enciende en granas y en ocres, en naranjas y amarillos, en rojos de fuego. La vida se invierte en espejo solo para mostrar su belleza a quien la sabe mirar…
Vi y sentí la aurora desde el lugar preciso que me fue señalado por los lugareños como paraje excepcional. Me aseguraron que como artista sucumbiría a tan majestuosa visión. Después de un largo paseo esperando el clarear del día y con la libreta de notas preparada, me senté en un banco desde el que casi se mojaban mis pies. Adiviné, poco a poco, los primeros rayos tras las montañas, aparecieron algunos barcos de pescadores aprovechando la tranquilidad del alba, se dibujaban sus siluetas ahora que comenzaba a abrirse el día. Mientras tanto un gran rayo de luz atravesó las montañas iluminó las aguas y dando un brillo estridente y cegador a cada segundo, fue ampliando su luz hasta inundarlo todo. Apenas fui consciente del paso del tiempo y mi bloc de dibujo continuaba cerrado. No me importó. Ahora solo debía elegir –de entre todo lo vivido- el momento exacto que reflejase mi emoción condensada en un cuadro. Al rayar el día, el mundo amanece en luces de otoño
Pedro Roldán
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